10 Ene Los orígenes de las placas de yeso
Somos expertos en la comercialización de placas de yeso para techos en Madrid sur. Hoy nos gustaría hablarte de sus orígenes y de cómo llegaron hasta nuestros hogares.
El producto que hoy en día conocemos como placa de yeso laminado nació en 1888 en Estados Unidos, como resultado de las investigaciones para la compañía de carbones y asfaltos New York Coar Tar Chemical. Trataban de encontrar un material sencillo que sirviera para proteger interiormente las estructuras de las edificaciones de la época. El primer paso fue crear un gran rodillo por el cual se deslizaba una lamina de cartón-paja que recogía una mezcla que al secarse formaba paneles rígidos. Se hicieron diferentes ensayos y se demostró que esta mezcla tenía un gran poder de aislamiento contra el fuego. Solo tenía un problema: no era lo suficientemente estético para que se pudiera utilizar como decoración final. Así, lo sustituyeron por un núcleo de yeso envuelto en una celulosa multihoja, conocida en todo el mundo como Gypsum Board.
¿Cómo llegaron estas placas de yeso para techos en Madrid sur hasta nuestros hogares? Muy fácil. La primera fabrica se instalo en New Jersey y su consumo se extendió rápidamente por todo EEUU y Canadá. Unos años más tarde aterrizó en Europa. Su primer destino, Inglaterra, cerca de Liverpool. En 1917 se construyó la primera fábrica europea y muy pronto se extendió por todo el Reino Unido y países nórdicos. De ahí, y poco tiempo después, pasó a Francia. A España llegó de la mano de Uralita, de ahí que al lanzar los productos al mercado se llamaron pladur, correspondiendo a «placas de uralita». Por ello, hoy en día las placas de yeso son más conocidas como pladur.
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